INGREDIENTES

Spaghettini, 400 gramos
Sal gruesa, 1 cucharadita
Manteca, 75 gramos
Aceite de oliva, 3 cucharadas
Dientes de ajo, 6
Panceta ahumada magra, 225 g
Huevos, 3
Queso rallado, 1/ 2 taza y c/extra
Crema de leche, 300 gramos
Sal, pimienta y nuez moscada, a gusto

Ponga a hervir abundante agua en una cacerola, junto con la sal gruesa.

En una sartén, derrita la manteca junto con el aceite.

Pique finamente el ajo y rehogúelo en esta mezcla, sin que se dore.

Corte la panceta en tiritas y saltéela donde están los ajos, hasta que esté crujiente. Mientras...

Cocine los spaghettini en el agua hirviendo hasta que estén al dente. Escúrralos y colóquelos en una fuente honda.

Bata los huevos hasta que la clara no se note y mézclelos con los spaghettini calientes.

La mezcla debe hacerse rápidamente para obtener una increíble salsita bien cremosa y totalmente libre de grumos.Mézclele enseguida la taza de queso rallado y la crema de leche.

Únale la panceta frita con los dientes de ajo picaditos, más el jugo que haya quedado en la sartén.

Caliente la mezcla sobre el fuego, mezclando al mismo tiempo y con toda la rapidez posible, para que el huevo de la salsa no se coagule.

Retire, sazone a gusto con sal y pimienta más el ingrediente fundamental de esta salsa: un poquito así de nuez moscada rallada.

Sírvalos ofreciendo aparte queso rallado extra. Y para los comedores de pan de siempre... ¡ponga sobre al mesa una panera colmada de "flautitas entrerrianas

FLAUTITAS ENTRERRIANAS

Disuelva 25 gramos de levadura en 1/3 de taza de agua
tibia, junto a 1 cucharadita de azúcar y 1 cucharadota de
harina. Deje leudar.
Haga una masa con la levadura leudada, 300 gramos de
harina, 2 cucharaditas de sal, 60 gramos de manteca derretida y 1/2 taza de leche tibia.
Cuando la masa leude el doble, estírela, úntela con
manteca derretida, enrolle y déjela leudar.
Recién entonces estírela hasta que quede bien fina,
córtela en cuadrados y enrolle cada uno desde el vértice para formar las flautitas. Colóquelas en placas, déjelas leudar otra vez... ¡y al horno, bien caliente, hasta dorar!